Cuerpo Humano

Corazonadas

Presentación

El corazón late segundo a segundo, y en cada latido transporta 7.6 litros de sangre a través de 96.5 kilómetros de “tubitos” naturales (las arterias y las venas) para llevar Oxígeno y nutrientes a todas las células del cuerpo humano. El corazón es como una bomba natural.

¿Has escuchado tu corazón?

Materiales

  • 1 tubo de papel higiénico.
  • 1 reloj.

Paso a paso:

  1. Colocar el tubo de papel en el pecho de un compañero(a), a la altura que se muestra en la figura. El tubo será tu “estetoscopio”.
  2. Escucha su corazón.
  3. Cuenta cuantos latidos de corazón tiene en un minuto y registra.
  4. Pide a tu compañero(a) que corra durante 3 minutos.
  5. Pasado ese tiempo, vuelve a poner el tubo de papel en el pecho de un compañero(a) y cuenta cuantos latidos escuchas en un minuto. Registra el resultado.
  6. Pueden repetir el experimento con varias personas, para comparar resultados al final.
  7. Puedes usar una hoja como la siguiente:

Situación

Persona 1

Persona 2

Persona 3

  1. En reposo (sin correr)

 

 

 

  1. Después de correr

 

 

 

Comparen los resultados ¿hubo diferencias?
Den una explicación de lo que ocurrió en el experimento

¿Cuántos latidos tendrías al acabar de despertar?  ¿Serían más o menos que en reposo?

Conexiones

La gente se arregla todos los días el cabello. ¿Por qué no el corazón?

(Proverbio chino)

Explicación científica

El corazón es una bomba natural que impulsa la sangre a través de todo el cuerpo, a través de “tubitos” que parecen las raíces o ramas de un árbol. Los tubitos o ramitas que salen del corazón hacia todo el cuerpo se llaman arterias, y son las encargadas de llevar el Oxígeno y los nutrientes a todas las células del cuerpo. Las venas son las ramitas que regresan la sangre de las células del cuerpo, para que vuelva a recoger Oxígeno y nutrientes.

Cada minuto los bebés pueden tener de 70 a 190 latidos, los niños de dos a nueve años tienen de 80 a 120 palpitaciones y los niños de 10 años en delante, los jóvenes y adultos tenemos de 70 a 110 latidos cada minuto. A esta medición se le llama “pulso”, y puede realizarse colocando los dedos índices y medio en:

• La parte posterior de las rodillas.
• La ingle.
• El cuello.
• La sien.
• La parte alta o la cara interna del pie.
• La muñeca de la mano.

En el experimento pueden escuchar las palpitaciones por minuto (llamada frecuencia cardiaca) y medir los cambios cuando la persona está en reposo y teniendo actividad física intensa.

El corazón es un músculo, y como todo músculo, requiere ser ejercitado para mantenerse en buenas condiciones.

El ejercicio dinámico (también llamado aeróbico) mejora la salud porque fortalece, entre otros, al sistema cardiovascular compuesto por el corazón, arterias y venas. La actividad física ayuda a oxigenar más las células del cuerpo, disminuye la presión de venas y arterias, y baja los niveles de colesterol y glucosa (azúcar) en la sangre. Caminar, correr, nadar o andar en bicicleta son ejercicios aeróbicos y basta con realizarlos de 30 a 60 minutos de 3 a 5 veces por semana.

También es importante dormir bien: entre siete y nueve horas al día reduce hasta en un 65 % el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. ¡Cuidemos nuestro corazón!

Competencias que favorece

Preescolar - Aplica el conocimiento científico para el cuidado de sí mismo, en relación con su higiene personal y la preparación de alimentos, evitando riesgos.

  • Usa información para resolver problemas, basándose en observación, registro de datos, recolección de muestras, dibujos, entrevistas y recursos escritos.
  • Comunica los resultados de observaciones y experimentos en forma oral.
  • Comparte e intercambia ideas sobre el mundo natural.

Primaria:

  • Identifica algunas acciones para el cuidado de la salud con base en el conocimiento del cuerpo y la nutrición.
  • Manifiesta responsabilidad al tomar decisiones informadas para cuidar su salud.
  • Aplica habilidades necesarias para la investigación científica: identifica problemas, plantea preguntas, realiza experimentos, recaba datos, realiza y registra observaciones de campo, resuelve preguntas y comunica resultados.
  • Elabora conclusiones con base en la evidencia disponible.
  • Argumentar utilizando términos científicos de manera adecuada y fuentes de información confiables, en diversos contextos y situaciones, para desarrollar nuevos conocimientos.
  • Los alumnos plantean preguntas y buscan respuestas sobre diversos fenómenos y procesos naturales para fortalecer su comprensión del mundo.