¿Te gusta jugar a las escondidas? Pues en la naturaleza éste es un juego que se usa mucho, aunque los animales no se esconden por diversión sino para sobrevivir. Un animal pequeño o indefenso tiene que pasar desapercibido para evitar convertirse en la cena de otro animal. A lo largo del tiempo, los animales han encontrado diferentes estrategias para esconderse cada vez mejor.
El trabajo debe realizarse por equipos de dos en dos (mínimo). Los niños con el turno de buscar las figuras pueden iniciar la actividad a 2 metros de la cartulina, para irse acercando poco a poco e identificar si la distancia está relacionada con la capacidad de encontrar algo en el ambiente más fácilmente.
La conexión más evidente es la del típico juego infantil “las escondidillas”.
Esta actividad se puede relacionar también con los libros infantiles de la serie “Encuentra a Wally”.
Lo interesante es destacar que este “juego” ocurre realmente todos los días en la naturaleza. La actividad invita a pensar si un lugar está verdaderamenrte desierto, sin vida, o en realidad hay muchos animales perfectamente escondidos que ellos pueden buscar con una mirada atenta. Para eso pueden revisar también el libro infantil “¿Por qué se esconden?”, editado por el Fondo de Cultura Económica. Autora: Maria Emilia Beyer. Colección Ojitos Pajaritos
Los animales en la naturaleza buscan sobrevivir cada día, y para eso hay que evitar convertirse en la cena de algún depredador. Muchas especies, tanto animales como vegetales, han desarrollado curiosas estrategias para esconderse o incluso, disfrazarse para engañar a la vista. Cambiar de color el cuerpo para parecerse al medio que los rodea es una estrategia favorita de los camaleones o los pulpos, pero no todos los seres vivos son tan espléndidos maestros del disfraz. Otros animales, simplemente, se colocan sobre troncos, suelos o piedras que sean parecidos al color de su cuerpo para así confundirse con el ambiente. Estas estrategias se conocen en Biología con el nombre de mimetismo.
Primaria (1º, 2º y 3er grado):